Desde América del Norte hasta Europa y Asia, los puentes de madera más famosos por su belleza y valor histórico.
Construidos con técnicas ancestrales o modernas, los puentes llaman siempre la atención tanto de los habitantes de un pueblo o una ciudad como de sus visitantes.
Pero cuando fueron esas estructuras fueron levantadas con materiales como la madera, sorprenden aún más por haber resistido el paso de las décadas y hasta de los siglos. Por eso, ante el deterioro y/o los incendios sufridos -el accidente más frecuente en los más históricos-, muchos puentes tuvieron que ser renovados parcial o totalmente.
Desde América del Norte hasta los países europeos y asiáticos, aquí elegimos cinco puentes de madera icónicos por su gran belleza y su valor histórico. Inclusive, en algunos casos, han ganado fama gracias al cine.
1. Puente Roseman, Estados Unidos
En el condado de Madison y en el estado de Iowa, el puente cubierto Roseman fue construido en 1883 por Harvey P. Jones y George K. Foster. Con más de 32 metros de largo, aunque la estructura fue renovada hacia 1992, se encuentra en su ubicación original, en Estados Unidos.
Su fama se debe a la novela de Robert James Waller «The Bridges of Madison County» (Los Puentes de Madison) y, especialmente, a la encantadora película del mismo nombre que protagonizaron Meryl Streep y Clint Eastwood.
Precisamente, Roseman es el puente que busca el fotógrafo Robert Kincaid (Clint Eastwood) cuando se detiene en la casa de Francesca (Meryl Streep) para pedir indicaciones. Y también aparece en la recordada escena en la que ella le deja una nota invitándolo a cenar.
No hay turista que no quiera fotografiarse en este lugar, y hasta hay personas que realizan el mismo recorrido que sugiere el filme.
2. Puente de la Capilla, Suiza
De origen medieval, el puente de madera de la Capilla (Kapellbrücke), atraviesa el río Reuss de Lucerna, Suiza, y es uno de los lugares más visitados por su atractivo turístico y los siglos de historia.
Construido en 1365, el puente conecta la ciudad antigua con la nueva de Lucerna, y es considerado el puente de madera más antiguo de Europa. También era el más largo, pero después del incendio sufrido en 1835, el puente perdió gran parte de su extensión.
Además, en 1993 tuvo que ser reconstruido como consecuencia del fuego del motor de una lancha ubicada en un embarcadero.
En la actualidad, el puente es un paseo artístico ya que los techos exhiben pinturas que cuentan parte de la historia de Lucerna.
3. Puente Kintai, Japón
Es uno de los puentes más emblemáticos de Japón. La estructura consiste en cinco arcos de madera a orillas del río Nishiki, y representa una obra de la arquitectura que data de 1673 como acceso al Castillo Iwakuni.
Ante el deterioro que provocaron las guerras y los tifones, el puente Kintai tuvo que ser íntegramente reconstruido y lo que en la actualidad puede visitarse es una réplica perfecta con los parámetros de la construcción de varios siglos atrás.
4. Puente Capilano, Canadá
En Vancouver, Canadá, el puente colgante de Capilano cruza el río con mismo nombre en la zona de Columbia Británica.
En la actualidad, tiene una longitud de 140 metros y se encuentra suspendido a 70 metros de altura sobre el río, pero fue construido en 1889 y originalmente se usaron cuerdas de cáñamo y tablas de cedro.
En 1903 se cambió el cáñamo por cables de alambre y hacia 1956 sufrió una reconstrucción integral. Después de pasar por distintas manos, hoy se encuentra en un parque donde hay bosques templados húmedos, senderos naturales y una gran colección privada de tótems de pueblos originarios de Canadá.
Tratándose de un lugar turístico en Vancouver, logra atraer a unos 800.000 visitantes por año.
5. Puente del Viento y de la Lluvia, China
Icónica y majestuosa, esta estructura de madera fue levantada en el territorio de Sanjiang, provincia de Guangxi, en China. Si bien fue inaugurada en 1924, pero su construcción llevó 12 años.
Finalmente, esta obra logró convertirse en la más importante de la tradición de puentes en madera del grupo étnico dong, atravesando el río Linxi y con unos 64 metros de largo
Construido con piedras y madera incrustadas, el puente ostenta cinco torres y aleros, convirtiéndose el centro de todas las miradas en medio de un paisaje bucólico.
Los brazos del río y los árboles de té sobre las colinas, mientras los campesinos trabajan en sus campos. Pero lo más sorprendente es la técnica utilizada para levantar el puente tanto tiempo atrás, ya que se sostiene en pie por siglos y no se usaron clavos ni remaches.
